29 de agosto de 2013

XXXIII Congreso de Teología: La teología de la liberación, hoy

 

LA TEOLOGÍA DE LA LIBERACIÓN, HOY
XXXIII CONGRESO DE TEOLOGÍA:

Fecha de celebración: del 5 al 8 de septiembre

Lugar: Salón de Actos de la Sede Regional
de Comisiones Obreras de Madrid


Queridas amigas, queridos amigos, de nuevo con vosotras y vosotros para presentaros el XXXIII Congreso de Teología, que este año ofrece novedades.

“La Teología de la liberación, hoy”. Aun cuando todos los Congresos de Teología se han movido en el horizonte de esta corriente teológica y han seguido su metodología y orientación, nunca la habíamos abordado como tema específico y monográfico. Y ya era hora de tratarlo de manera monográfica, precisamente cuando se oyen voces de que la Teología de la Liberación no goza de buena salud, incluso que ha muerto, y otros informes médicos similares, la mayoría procedentes de adversarios que confunden su deseo mortífero con la realidad, que es muy otra.

Este 33 Congreso quiere ser una reflexión colectiva sobre la Teología de la Liberación desde los nuevos desafíos a los que deben responder el cristianismo y la teología en el nuevo escenario cultural, religioso, político y económico. Y lo haremos con la guía de cualificados especialistas y testigos de los diferentes continentes que ofrecerán sus análisis y experiencias en clave intercontinental, intercultural e interreligioso. Será, sin duda, el Congreso con mayor presencia y representación de las diferentes teologías de la liberación del mundo: América Latina, Asia, África y Europa.

Abrirá el Congreso Juan Torres, catedrático de Economía de la Universidad de Sevilla, y uno de los más prestigiosos economistas con propuestas alternativas al neoliberalismo, que tan catastróficas consecuencias está en los sectores más vulnerables de la sociedad. Hablará sobre La situación económica y política en el mundo: problemas y desafíos globales. Sí, Hay alternativas, como demuestra en su libro del mismo título escrito con Alberto Garzón y Vicens Navarro. La voz de Juan Torres merece ser escuchada.

A la conferencia seguirán comunicaciones de tres experiencias de lucha contra las políticas actuales de recortes. Luis Chamarro, representante de la Plataforma de Afectados por las Hipotecas, pionera en la oposición a los desahucios, expondrá las líneas fundamentales de actuación de dicha plataforma, las reivindicaciones que hacen y la filosofía que la guía. Diego Cañamero, dirigente del Sindicato Andaluz de Trabajadores, ejemplo de tenacidad en la defensa de los derechos de los trabajadores del Campo y, recientemente, de acciones solidarias con los que viven las situaciones más dramáticas de la crisis, expondrá la filosofía que guía dicho Sindicato. La JOC hará un análisis crítico de la reforma laboral, en la línea del documento que firmó con la HOAC y que fue vetado por el arzobispo de Madrid.

A continuación dedicaremos una Mesa a los relatos de personas que expondrán diferentes testimonios de liberación vividos en América Latina. Pepa Raba y José Mª Concepción contarán su Convivencia con Père Casaldáliga. Pedro Serrano y Fernando Bermúdez hablarán de sus experiencias liberadoras en Honduras y Guatemala, respectivamente. Monseñor Raúl Vera, obispo de Saltillo (México) describirá su compromiso con los migrantes en la frontera con los Estados Unidos.

Al análisis de la situación y a las experiencias alternativas seguirá una reflexión ética centrada en la solidaridad y la justicia como valores morales a fomentar, especialmente en tempos de crisis. Correrá a cargo de Adela Cortina, catedrática de Ética de la  Universidad de Valencia y una de las principales referentes de la filosofía moral en España. El sugerente título de su conferencia es  Otro Mundo es Necesario: Justicia y solidaridad.

No queremos que la reflexión sobre la Teología de la liberación se mueva en el terreno de la abstracción, la extraterritorialidad y la intemporalidad. Por eso daremos la palabra a especialistas y testigos de los diferentes continentes La Teología de la liberación en Europa será abordada desde el feminismo, los derechos sociales y los derechos sexuales y reproductivos. La teóloga Teresa Toldy, investigadora de la Universidad de Coimbra, y una de las mejores especialistas europeas en teología feminista hablará de La teología feminista en Europa. Frida Harth miembro del movimiento Católicas por el Derecho a Decidir, hablará de los derechos sexuales y reproductivos. Juan José Tamayo, secretario general de la Asociación de Teólogos y Teólogas Juan XXIII, hablará de Otra teología es posible desde Europa. Esteban Beltrán, director de Amnistía Internacional (sección española) centrará su reflexión en la amenaza de que están siendo hoy objeto los derechos sociales.

Asia estar muy presente en el Congreso a través de la participación de Juan Masiá, profesor de la Universidad de Sophia de Tokyo y uno de los más prestigiosos especialistas mundiales en bioética, quien hablará del sugerente tema Buda y Jesús, caminos de liberación en un esfuerzo de aproximación de las tradiciones cristiana y budista por vía liberadora a través de sus fundadores Buda y Jesús de Nazaret, subrayando sus afinidades.

Como viene siendo costumbre en nuestros Congresos, también estará presente la voz de la teología africana de la liberación, esta vez representada por el teólogo camerunés Cyprien Melibi, uno de los mejores especialistas en el pensamiento teológico y sociológico de Jean Marc Ela. Hablará de la Teología de la liberación en África.

El recorrido por las teologías de la liberación de los diferentes continentes se completa con la conferencia de monseñor Raúl Vera, obispo de la diócesis mexicana de Saltillo, una de las voces proféticas más interpelantes, críticas del críticas del Primer Mundo y más escuchadas desde América Latina en el mundo.  Hablará de la La Iglesia de los pobres.

Enriqueceremos las experiencias, los análisis y las reflexiones con otros lenguajes, como el Cuentacuentos a cargo de Ana Castellano, el Recital poético-musical, animado por el cantautor Domingo Pérez, y el celebrativo-eucarístico que coordinarán las Comunidades de base de Nuevas Palomeras y Corinto.

Este es el ofrecimiento que os hacemos para compartir cuatro días, del 5 al 8 de septiembre, como punto de partida para comenzar el curso con nuevas ideas, propuestas y sugerencias que tendremos ocasión de profundizar y llevar a la práctica a lo largo de 2013-2014.

Creemos que merece la pena participar. Estáis todas y todos invitados. Corred la voz. Os esperamos.

Tiempos de rebeldía indignada

 
Las políticas neoliberales que aplica el gobierno Rajoy y muchos de los gobiernos autonómicos, apoyadas e impulsadas por la propia Unión Europea, están provocando la destrucción práctica del estado de bienestar que tanto tiempo nos costó construir. Quieren hacernos pasar como ajustes o recortes presupuestarios inevitables lo que, en realidad, son pérdidas de derechos sociales fundamentales ante las que debemos responder con nuestra rebeldía indignada.

Esas políticas son responsables también de la dramática realidad en la que vivimos, hecha de realidades tremendas como la de la alta tasa de desempleo, junto con el alargamiento estructural de esta situación para millones de personas; personas que pierden su vivienda en propiedad o alquiler y quedan junto con sus familias en la más completa indefensión; migrantes más vulnerables que pierden el derecho a la asistencia sanitaria; o recortes en el campo sanitario, pero también en el educativo, en la atención a las personas dependientes, en el acceso a los servicios de bienestar social, cultural e incluso en el campo de la investigación científica. Esa dramática realidad, originada por tantas desafortunadas realidades cotidianas constituirá la base de reflexión de la IV Asamblea de Redes Cristianas que celebraremos en Santiago de Compostela los días 6 y 7 de Diciembre.

En nuestra vida cotidiana hemos asumido el compromiso de luchar activamente para cambiar esas realidades de opresión, pobreza y desesperanza que afectan a tantos millones de personas (más de 6 millones en situación de desempleo, más de 10 millones en pobreza relativa, más de 1, 5 millones en situación de severa exclusión social). Esa lucha transformadora nos resulta cada vez más una rebeldía imprescindible ante la dureza de las agresiones que sufrimos. Esa rebeldía que nos situó entre la juventud y las personas mayores del 15 M; que nos mueve a juntarnos con Stop Deshaucios; a ocupar sucursales de entidades bancarias que engañaron a pequeños ahorradores con las llamadas participaciones preferentes; a formar parte de las brigadas vecinales que impiden la detención de inmigrantes en situación de irregularidad administrativa en Lavapiés; o a manifestarnos contra la desintegración, ideologización y privatización en marcha de nuestros sistemas sanitario y educativo. Y todos los magníficos etcéteras en los que estamos profundamente comprometid@s, como lo estuvo Jesús de Nazaret.

Sí, ahí, rebelándonos frente a la crisis y la represión, estamos los y las de Redes, pero mirando también, aunque sea de reojo, hacia nuestra propia Iglesia para exigir, y exigirnos, la rebeldía necesaria para conseguir la equiparación de derechos de las mujeres y de las personas homosexuales, o el derecho de los sacerdotes a formar una familia; y, muy especialmente, el inevitable proceso de democratización pendiente y la exigencia de un posicionamiento contundente a favor de las personas empobrecidas o excluidas. Necesitamos expresar nuestra rebeldía contra las políticas neoliberales de nuestros gobiernos que tanto daño están haciendo entre la clase media y baja de nuestra sociedad.

En todo caso, nosotr@s celebraremos en Santiago de Compostela, en el final de un famoso Camino de peregrinación, nuestra alegre, esperanzada y compartida Rebeldía Indignada. Allí soplará con fuerza, sin duda, el espíritu liberador de Jesús de Nazaret y para esa Gran Fiesta de Redes Cristianas quedamos ya convocad@s.

Para inscribirte o obtener más información visita www.asamblearedes.net

Contra la guerra

LOS CRISTIANOS DE MEDIO ORIENTE CONTRA LA INTERVENCIÓN

 
Es unánime la postura de las comunidades cristianas en el Medio Oriente. Un no rotundo a la incursión militar que los Estados Unidos, Gran Bretaña y Francia, con el apoyo de Turquía y la Liga Árabe, estarían preparando como respuesta al uso de armas químicas por parte del presidente sirio Assad. En las Iglesias la consideran una decisión que acarreará solamente mayores problemas y no la añorada solución a la guerra que desde hace dos años azota Siria.Particularmente se escucha con fuerza el no que llega desde Deir Mar Musa, el monasterio que fue fundado en Siria por el padre Paolo Dall''Oglio, el jesuita secuestrado hace casi un mes en Raqqa y de quien no se tienen noticias. Un lugar que no puede ser acusado de apoyar el régimen de Assad. «Nos encontramos en una fase de extremo sufrimiento –declaró hoy a la agencia Fides el padre Jacques Mourad, que se ocupa de la dirección del monasterio desde que Dall''Oglio fue expulsado el año pasado del país. Esperamos que los países occidentales asuman una posición justa ante esta tremenda crisis siria. La postura correcta es rechazar cualquier tipo de violencia, detener las armas, no poner los unos contra los otros, defender y proteger los derechos humanos». Mucho más claramente, por si había dudas, se expresó sor Houda Fadoul, que junto al jesuita romano fundó la comunidad femenina: «No podemos aceptar o apreciar una intervención armada de las potencias extranjeras. Continuamos con nuestra misión, que es la de elevar a Dios un culto espiritual, sobre todo para educar a los jóvenes al diálogo y la paz».

El patrairca siro-católico Youssef III Younan también condenó con palabras muy duras la eventual intervención, en una entrevista con el sitio terrasanta.net: «En lugar de ayudar a las diferentes partes en conflicto a que encuentren vías para la reconciliación, poner en marcha el diálogo para las reformas basadas en un sistema pluralista de gobierno, hasta ahora estas potencias solamente han armado a los rebeldes, incitando a la violencia y envenenando todavía más las relaciones entre sunitas y chiítas. El occidente cree que si los sunitas llegan al gobierno la democracia sustituirá a la dictadura, pero esta es una enorme ilusión: cambiar el régimen con la fuerza, sin dar garantías a los partidos de inspiración laica, desencadenará un conflicto más dramático que el de Irak».

Justamente desde Baghdad, el patriarca caldeo Louis Raphael Sako habló de una «catástrofe». La intervención militar estadounidense, declaró a la agencia Fides, «sería como provocar la erupción de un volcán con una explosión para arrasar Irak, el Líbano, Palestina. Y tal vez hay alguien que quiera justamente esto». El patriarca de los caldeos citó el antecedente de su país: «Después de diez años de la intervención de la llamada "coalición de voluntarios" que derrocó a Saddam, nuestro país sigue siendo golpeado por las bombas, los problemas de seguridad, la inestabilidad de la crisis económica».

Desde el Líbano, el patriarca maronita Béchara Rai expresó claramente su pensamiento hace algunos días en una entrevista con la Radio Vaticana: «Todo lo que está sucediendo en Medio Oriente (tanto en Egipto como en Siria o en Irak) es una guerra que tiene dos dimensiones. En Irak y en Siria, la guerra es entre sunitas y chiítas; en Egipto la guerra es entre fundamentalistas, entre los que están la Hermandad Musulmana y los moderados. Son guerras sin fin, pero, y siento deber decirlo, hay países, sobre todo occidentales (pero también del Oriente), que están fomentando todos estos conflictos. Hay que encontrar una solución a todos estos problemas».

Gran preocupación también surge en Jerusalén, en donde el Custodio de Tierra Santa, el padre Pierbattista Pizzaballa, indicó: «Las imágenes que tenemos de Siria son atroces, hablan por sí mismas –comentó en una entrevista con el Franciscan Media Center. Pero, conociendo el Medio Oriente, es muy difícil saber quién hace qué cosa. La comunidad política internacional debe encontrar soluciones inmediatas, a través de presiones, para que todo esto se acabe de una vez. No creo que hoy en Siria haya gente que tenga razón y gente que no tenga razón. Cuando se usa la violencia todos se equivocan».

Mientras tanto, el prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales, el cardenal Leonardo Sandri, lanzó también un enérgico llamado a retomar, «en estas oras de trepidación» en las que se «intensifica la oración por la situación en Siria»: «el ardiente llamado de Papa Francisco del Ángelus del domingo pasado» que «llevó consuelo a toda la población siria, como aseguraron a la Congregación para las Iglesias Orientales los pastores y fieles que siguen invocando el don de la paz. A las comunidades de la madre patria se unen muchos orientales esparcidos por el mundo en el mismo llamado para que la reconciliación sea más fuerte que el clamor de las armas».

«La superior instancia de paz y de vida –concluyó– debe prevalecer sobre cualquier otro interés o resentimiento de parte. Sobre cualquier otra razón, para la comunidad internacional deben ser prioritarios la reconciliación, la justicia y el respeto solidario de los derechos personales y sociales, incluso religiosos, de todos e indistintamente los elementos de la población del Medio Oriente». 

 
(de la revista “VALORES RELIGIOSOS” - 29 de agosto de 2013)

2 de agosto de 2013

OTRA POLÍTICA ES POSIBLE DESDE LA COMUNIÓN

COMUNICADO DE LA HOAC
CURSOS DE VERANO 2013


OTRA POLÍTICA ES POSIBLE DESDE LA COMUNIÓN


Se han celebrado en Salamanca, en la Residencia de los Padres Paúles, los Cursos de Verano de la Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC), un espacio de oración, diálogo, profundización y convivencia que hemos compartido alrededor de trescientos militantes, y simpatizantes y consiliarios de este movimiento apostólico. La temática que los ha vertebrado ha sido «Ante una democracia rota, otra política es posible desde la comunión».
Los cursos han constado de dos jornadas: Jornadas de Consiliarios, del 8 al 12 de julio, y Jornadas abiertas, dirigidas a militantes y simpatizantes, del 13 al 17 de julio:
- Las Jornadas de Consiliarios han ayudado a orar y reflexionar sobre el servicio de los consiliarios en el acompañamiento a los y las militantes, en especial, en la búsqueda de la Comunión Social. Para ello, han profundizado, con la ayuda de D. Carlos Escribano Subías, Obispo de Teruel y Albarracín y Obispo consiliario de la Acción Católica Española, en “Los consiliarios: orantes y evangelizadores a la luz del Vaticano II y al servicio del Reino”. También, han sido interpelados sobre “El consiliario: místico de la comunión con los empobrecidos”, con la aportación del militante de la diócesis de Sevilla, Alfonso Alcaide Maestre.

- Las Jornadas Abiertas, como viene siendo habitual, han tenido:

a) En un primer momento, un espacio de oración, a partir de experiencias de militantes hoacistas comprometidos y comprometidas con los empobrecidos del mundo obrero y del trabajo: desahucios, barrios ignorados y militancia en partidos políticos, por Joaquín Sanchez Sánchez (Cartagena-Murcia), Isabel Salinas Cañas (Granada) y Melchor Moreno de la Torre (Astorga), respectivamente. También con la reflexión: “Colaboración por la existencia, comunión de acción en Rovirosa” ofrecida por Maite Valdivieso Peña, militante de la diócesis de Bilbao, nos ha invitado a vivir la espiritualidad cristiana y la lucha por la justicia, según Guillermo Rovirosa, primer militante de la HOAC.

b) En un segundo momento: Un VER con Arcadi Oliveres, profesor de Economía Aplicada de la Universidad Autónoma de Barcelona y presidente de” Justícia i Pau”, que ha profundizado en el contexto actual en el que se desarrolla nuestra vida social y la dinámica política. Un contexto caracterizado, entre otras cosas, por la eliminación de controles y de supervisión de la actividad económica, favoreciendo la economía financiera y especulativa sobre la productiva; la comunidad política, lejos de desarrollar una función de garante de los derechos sociales de las personas, está al servicio de las exigencias de los intereses económicos de una minoría; una quiebra de la democracia como proyecto de convivencia en la igualdad, la libertad y la participación de todos los ciudadanos; y una profunda crisis de las organizaciones políticas, sindicales y sociales que deja en la indefensión a la ciudadanía, bajo un sistema de desinformación que configura un ideario sustentado en falsas verdades. Pero un contexto donde, al mismo tiempo, también encontramos signos de esperanza como son el movimiento de indignación y reacción de muchos hombres y mujeres, especialmente jóvenes.

Un JUZGAR, con la ayuda de Demetrio Velasco, cura diocesano y catedrático de Pensamiento Político de la Universidad de Deusto, que a través de su reflexión: «La Iglesia promotora de la acción política como camino para buscar el Reino de Dios y su Justicia», hemos reflexionado sobre la aportación que como Iglesia debemos hacer, iluminados por el Evangelio y la Doctrina Social de la Iglesia: un proyecto de comunión que promueva el desarrollo de la reciprocidad y la singularidad del ser humano, deslegitimando la dominación, asumiendo con radicalidad profética la igualdad de todas las personas, generando lazos sociales, desde la cultura de la compasión que implica la opción por las víctimas y una llamada a trabajar por la justicia redistributiva y la comunión entre las personas, como camino hacia el Reino de Dios.

Y, finalmente, un ACTUAR con la exposición de Cristina Vega, militante de la HOAC de Canarias, bajo el título: «Retos para nuestro compromiso comunitario desde la vivencia de la política orientada por la comunión», donde hemos querido repensar la vida y misión de la HOAC y sus militantes desde este aspecto, siendo conscientes de que es un largo camino que se recorre a pequeños pasos. Nos comprometemos a:

  • Poner a las víctimas de este sistema en el centro de nuestra acción política, haciéndolas protagonistas.
  • Ser una comunidad de hombres y mujeres que vive la comunión encarnada en el mundo obrero más empobrecido.
  • Desarrollar nuestra acción política como una dimensión ineludible de la tarea evangelizadora, convirtiendo nuestro compromiso en expresión de la Caridad Política en la que el amor y la justicia son inseparables.
  • Promover una nueva cultura política que conciba la acción política como instrumento fundamental para construir justicia en las relaciones sociales. Vivir la política como respuesta a la necesidad de vida social que tenemos las personas.
  • Colaborar para recuperar el sentido comunitario de la lucha por la justicia y el valor de las organizaciones sociales para combatir el empobrecimiento y la deshumanización.
  • Favorecer la visibilidad de lo que está ocurriendo en el mundo obrero y del trabajo, colaborando a recuperar la esperanza de que otra forma de vida y de organización social son posibles.
  • En definitiva, anunciar y construir otro mundo que es posible con Jesucristo que está presente en los crucificados de la historia, para ser, como desea el Papa Francisco, “una Iglesia pobre y para los pobres”, al servicio del mundo.

Salamanca, 17 de julio de 2013

1 de agosto de 2013

El legado que nos ha dejado el Papa Francisco

Leonardo Boff, teólogo

 

No es fácil resumir en pocas palabras los puntos relevantes de las intervenciones del Papa Francisco en Brasil. Destaco algunos con el riesgo de omitir otros importantes.
El legado mayor fue la figura misma del Papa Francisco: un humilde servidor de la fe, despojado de todo aparato, tocando y dejándose tocar, hablando el lenguaje de los jóvenes y diciendo las verdades con sinceridad. Representó al más noble de los líderes, el líder servidor que no hace referencia a sí mismo sino a los demás, con cariño y cuidado, evocando esperanza y confianza en el futuro.
En el campo político encontró un país perturbado por las multitudinarias manifestaciones de los jóvenes. Defendió su utopía y el derecho a ser escuchados. Presentó una visión humanística en la política, en la economía y en la erradicación de la pobreza. Criticó duramente un sistema financiero que descarta los dos polos: a las personas mayores, porque ya no producen, y a los jóvenes, no creándoles puestos de trabajo. Las personas mayores no pueden trasmitir su experiencia y a los jóvenes se les priva de construir su futuro. Una sociedad así puede colapsar.
El tema de la ética, fundada en la dignidad transcendente de la persona, ha sido recurrente. Con referencia a la democracia ha acuñado la expresión “humildad social”, que es hablar cara a cara, entre iguales y no desde arriba hacia abajo. Entre la indiferencia egoísta y la protesta violenta ha apuntado una opción siempre posible: el diálogo constructivo. Tres categorías volvían una y otra vez: el diálogo como mediación para los conflictos, la proximidad a las personas más allá de todas las burocracias y la cultura del encuentro. Todo el mundo tiene algo que dar y algo que recibir. “Hoy, o se apuesta por la cultura del encuentro, o perdemos todos”.
En el campo religioso ha sido más fecundo y directo. Reconoció que ha habido “jóvenes que perdieron la fe en la Iglesia e incluso en Dios por la incoherencia de muchos cristianos y ministros del evangelio”. El discurso más severo lo reservó para los obispos y cardenales latinoamericanos (CELAM). Reconoció que la Iglesia –y él se incluía–, está atrasada en lo que se refiere a la reforma de sus estructuras . Y les instó no sólo abrir las puertas a todos, sino a salir al mundo y a las “periferias existenciales”. Criticó la “psicología principesca” de algunos miembros da jerarquía. Tienen que ser pobres interior y exteriormente. Dos ejes deben estructurar la pastoral: la cercanía al pueblo, más allá de las preocupaciones organizativas, y el encuentro, marcado de cariño y ternura. Habla incluso de la necesaria “revolución de la ternura”, cosa que él demostró vivir personalmente. Entiende la Iglesia como madre que abraza, acaricia y besa. Los pastores deben cultivar esta actitud materna para con sus fieles.
La Iglesia no puede ser controladora y administradora, sino servidora y facilitadora. Enfáticamente afirma que la posición del pastor no es la del centro sino la de la periferia. Esta afirmación es de destacar: el puesto de los obispos debe ser o “al frente para indicar el camino, o en el medio para mantenerlo unido y neutralizar las desbandadas, o atrás para evitar que alguien se extravíe”, y debe darse cuenta de que “el rebaño tiene su propio olfato para encontrar nuevos caminos”. Además, da centralidad a los laicos para decidir junto con los pastores los caminos de la comunidad.
El diálogo con el mundo moderno y la diversidad religiosa: el Papa Francisco no mostró ningún miedo ante el mundo moderno; desea intercambiar y ser parte de un profundo movimiento de solidaridad con los privados de alimento y de educación. Todas las confesiones deben trabajar juntas en favor de las víctimas. Poco importa que la atención la preste un cristiano, un judío, un musulmán u otro. Lo decisivo es que el pobre tenga acceso al alimento y a la educación. Ninguna confesión puede dormir tranquila mientras los desheredados de este mundo estén gritando. Aquí se impone un ecumenismo de misión, todos juntos al servicio de los demás.
A los jóvenes les dedicó palabras de entusiasmo y de esperanza. Contra una cultura de consumismo y de deshumanización les pidió ser “revolucionarios” y “rebeldes”. Por la ventana de los jóvenes entra el futuro. Criticó el restauracionismo de algunos grupos y el utopismo de otros. Puso el acento en la actualidad: “en el hoy se juega la vida eterna”. Los invitó siempre al entusiasmo, a la creatividad, a ir por el mundo difundiendo el mensaje generoso y humanitario de Jesús, el Dios que se hizo cercano y se encontró con los seres humanos.
En la celebración final había más de tres millones de personas, alegres, festivas, en el más absoluto orden. Un aura de benevolencia, de paz y de felicidad descendió sobre Río de Janeiro y sobre Brasil que sólo podía ser la irradiación del tierno y fraterno Papa Francisco y del Sentimiento Divino que supo transmitir.

“Que me perdonen los obispos, pero la Iglesia tiene que salir a la calle”

El País

La cita era en la catedral metropolitana de Río de Janeiro. El papa Francisco había quedado con 5.000 jóvenes argentinos —el 10% de los que cruzaron la frontera para participar en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ)— para pasar juntos unos minutos. Podría haberles dicho qué tal, cómo están ustedes, pásenla bien y recen por mí. Un encuentro ortodoxo entre un papa de 76 años y unos muchachos cristianos encantados de tenerlo tan cerca. Pero Jorge Mario Bergoglio no es un pontífice al uso, y la armó.

En un momento del encuentro, pidió a los jóvenes: “Quiero que salgan a la calle a armar lío, quiero lío en las diócesis, quiero que se salga fuera, quiero que la Iglesia salga a la calle, quiero que la Iglesia abandone la mundanidad, la comodidad y el clericalismo, que dejemos de estar encerrados en nosotros mismos”. Después, se giró significativamente hacia los prelados que lo acompañaban y les dijo: “Que me perdonen los obispos y los curas si los jóvenes les arman lío, pero ese es mi consejo…”.

El consejo se las trae. Porque clericalismo no es otra cosa que la excesiva intervención del clero en la vida de la Iglesia, dejando sin voz ni voto a los demás miembros. Al Papa, y se le nota, le cargan sus colegas afectados, pagados de sí mismos, príncipes de una Iglesia altiva y alejada. De hecho, los únicos callos que ha pisado hasta ahora han sido los de la Curia de Roma, a la que está bajando a la fuerza de los coches oficiales y de las cuentas secretas en el banco del Vaticano. Ante sus jóvenes compatriotas se mostró revoltoso y feliz. Les dijo: “Pienso que esta civilización mundial se pasó de rosca. Es tal el culto que ha hecho al dios dinero que estamos presenciando una filosofía y una exclusión de los dos polos de la vida que son las promesas de los pueblos: los ancianos y los jóvenes”.

Jorge Mario Bergoglio, hablando sin papeles, animó a los jóvenes a hacerse valer, pero también a prestar atención a los mayores: “Ustedes, por favor, dejen hablar a los viejos, escúchenlos. Y a los viejos les digo, no se dejen excluir. Abran la boca. No claudiquen de ser la reserva de nuestro pueblo, transmitan la justicia, la historia, los valores, la memoria. Hay una especie de eutanasia escondida, una eutanasia cultural contra los viejos, no se les deja hablar y actuar”.

En un momento del encuentro, y ante el hecho de que —por motivos de seguridad— los jóvenes participantes estaban detrás de una valla, Francisco les dijo: “Les agradezco esta cercanía. Me da pena que estén enjaulados. Yo por momentos siento también lo feo que es estar enjaulado… Recen por mí, lo necesito”.

Ante el accidente ferroviario de Santiago

Desde Redes Cristianas queremos expresar nuestro gran dolor ante el accidente ferroviario de Santiago de Compostela. Enviamos todo nuestro apoyo y solidaridad a las familias de las personas fallecidas, así como toda nuestra fuerza y oración a quienes han sufrido heridas y daños. Les sentimos como hermanos y hermanas, víctimas de un accidente trágico del que se tendrán que esclarecer las causas.

Expresamos nuestro reconocimiento ante la importantísima labor del cuerpo de bomberos, las fuerzas de seguridad y el personal sanitario que están actuando. Pero, sobre todo, expresamos nuestra admiración hacia la parroquia de Angrois y todo el pueblo de Galicia que se ha volcado solidariamente y está sacando lo mejor de sí mismo.

Nos resulta especialmente doloroso, dado que Santiago de Compostela será la sede donde se celebrará nuestra próxima Asamblea el próximo mes de diciembre y, desde Galicia, es mucha la gente vinculada a Redes Cristianas que ya está trabajando para acogernos allí. De su solidaridad y buen hacer ya teníamos constancia, pero en esta ocasión subrayamos especialmente su capacidad para sacar lo mejor de dentro y ponerse a actuar.

Un abrazo fuerte y fraterno de todas y cada una de las personas que integran los colectivos y comunidades de Redes Cristianas.